Existen experiencias que sabes que son imprescindibles vivir al menos una vez en tu vida, o así lo creía yo. Todo merece la pena vivirse una segunda vez, y así me ha ocurrido a mí con la Jornada…
Vivimos bombardeados de mensajes. Hoy, más que buscar señales, nos estamos acostumbrando a una recepción pasiva de las mismas. Somos un espacio abierto, en el que la decodificación de las preguntas…