Declaración final y acuerdos de la Asamblea General ordinaria de FERE

La Asamblea General de la Federación Española de Religiosos de Enseñanza (FERE), reunida en Madrid, los días 22 y 23 de febrero, que representa a dos mil centros educativos, en los que se escolarizan 1.090.497 alumnos, ha reflexionado acerca de la aportación específica de la escuela católica dirigida por Instituciones religiosas y sobre las anunciadas reformas de la legislación educativa y, como fruto de esa reflexión, como Declaración final, adopta los siguientes acuerdos, que desea hacer llegar a las comunidades educativas, a los poderes públicos y, en general, a toda la sociedad y cuyo desarrollo encomienda a la Junta Directiva:

1. Profundizar la aportación que nuestros centros realizan en orden a:

  • la educación integral (académica, en valores y religiosa) de los niños y jóvenes.
  • la cohesión social, por estar abiertos a todos sin distinciones de tipo económico, cultural o social.
  • la integración de discapacitados y de minorías étnicas y culturales, como un servicio a mejora de la calidad del sistema educativo, al enriquecimiento de los valores morales de la sociedad y al afianzamiento de unas relaciones sociales basadas en la igualdad radical de todos los hombres y mujeres.

2. Promover que las nuevas leyes (de Calidad y de Formación Profesional) anunciadas por el Gobierno:

  • proclamen la gratuidad de la enseñanza desde los 3 años y la consiguiente generalización del concierto educativo a estas enseñanzas y amplíen la concertación de las enseñanzas de Bachillerato, Formación Profesional y Programas de Garantía Social, como un medio para asegurar la libertad, la igualdad y el efectivo ejercicio del derecho a la educación, sin discriminación.
  • profundicen en la autonomía efectiva de los centros como un reconocimiento de los derechos fundamentales de dirección y de participación y un medio para asegurar el dinamismo de las escuelas y la mejora de su oferta educativa.
  • garanticen la adecuada atención a la diversidad en los centros, tanto en los aspectos curriculares (diseño de las enseñanzas) como de financiación, teniendo como punto de partida las necesidades educativas de cada uno de los alumnos, como medio para una educación integral y personalizada.
  • se fundamenten en el consenso como medio de asegurar actuaciones eficaces y duraderas, de las que se sientan partícipes todos los sectores afectados.

3. Potenciar la acción de FERE,

  • en el Estado y en las Comunidades Autónomas,
  • en la representación de las Instituciones y de los Centros (Consejos escolares territoriales, Consejos de la Formación Profesional, interlocución social, etc),
  • y en los servicios a sus afiliados, como medio para hacer presente la voz y la singular aportación de nuestros centros y contribuir a la mejora de la calidad de nuestra oferta educativa y de la dirección y gestión de los centros en unos tiempos de tránsito hacia modelos más participativos de escuela católica.

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